El informático Takeo Kanade (Hyogo, Japón, 1945) sonríe mucho; y también se ríe mucho. Aunque ande rondando los ochenta, no se cansa de trabajar y muestra la misma pasión por la tecnología que tenía hace 40 años, cuando logró, junto a su colega Bruce Lucas, que los ordenadores dejasen de ser poco más que cajas de zapatos con capacidad para calcular nóminas. Lo que el actual profesor de la Universidad Carnegie Mellon (EE.UU.) quería era que las máquinas mirasen como miran las personas , o que lo hiciesen incluso mejor. Y vaya si lo consiguió. Su trabajo dentro del terreno de la visión artificial , de la que es padre, ha hecho posible que los coches puedan funcionar sin necesidad... Ver Más
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