miércoles, 19 de febrero de 2020

La Estrategia Digital Europea y el Libro Blanco de Inteligencia Artificial ya son oficiales: estas son sus claves

La Estrategia Digital Europea y el Libro Blanco de Inteligencia Artificial ya son oficiales: estas son sus claves

La Unión Europea acaba de hacer oficiales la Estrategia Digital Europea y el Libro Blanco de Inteligencia Artificial. En el primero de los documentos, la UE busca explicar su visión de un "mercado único de datos" y "atajar los problemas identificados a través de medidas políticas y financiación. En el Libro Blanco de Inteligencia Artificial, el organismo busca poner sobre la mesa las "opciones de políticas" para promover la asimilación de la IA y abordar los riesgos asociados a ciertos usos de esta nueva la tecnología".

Ambos documentos son accesibles a través de la web del Parlamento Europeo y, por el momento, solo están disponibles en inglés. Son documentos densos, así que en los próximos párrafos vamos a desglosar las ideas clave de cada uno de ellos.

Las claves de la Estrategia Digital Europa: problemas y medidas

Inteligencia Artificial

De acuerdo a la UE, la Estrategia Digital Europea responde a ocho problemas principales, que pasamos a exponer a continuación con un pequeño resumen:

  • La disponibilidad de los datos: "el valor de los datos radica en su uso y reutilización. Actualmente no hay suficiente datos disponibles para una reutilización innovadora, incluso para el desarrollo de la inteligencia artificial".
  • Desequilibrios en el poder del mercado: "además de la alta concentración en la prestación de servicios en la nube y las infraestructuras de datos, también hay desequilibrios de mercado en relación con el acceso y la utilización de datos, por ejemplo cuando se trata del acceso a los datos por parte de las PYMES".
  • Interoperabilidad y calidad de los datos: "debe fomentarse la aplicación de formatos y protocolos compatibles estándar y compartidos para reunir y procesar datos de diferentes fuentes de manera coherente e interoperable en todos los sectores y mercados verticales".
  • Gobierno de los datos: "para que estos espacios de datos sean operativos, se necesitan enfoques y estructuras organizativas (tanto públicas como privadas) que permitan la innovación impulsada por los datos sobre la base del marco jurídico existente".
  • Infraestructura de datos y tecnologías: "la UE necesita reducir sus dependencias tecnológicas en estas infraestructuras estratégicas".
  • Potenciación de los individuos para que ejerzan sus derechos: "los individuos valoran el alto nivel de protección que otorga el GDPR y la privacidad electrónica. Sin embargo, sufren de la ausencia de instrumentos y normas técnicas que hagan que el ejercicio de sus derechos sea sencillo y no excesivamente oneroso".
  • Habilidades y conocimientos de datos: "el nivel de conocimiento general de los datos en la fuerza de trabajo y en toda la población es relativamente bajo y existen lagunas en la participación (por ejemplo, de las personas de mayor edad)".
  • Ciberseguridad: "en la esfera de la seguridad cibernética, Europa ha desarrollado un amplio marco para ayudar a los Estados Miembros, las empresas y los ciudadanos a hacer frente a las amenazas a la seguridad cibernética y ataques, y Europa seguirá desarrollando y mejorando sus mecanismos para proteger sus datos y los servicios que se basan en ellos".

Dichos problemas quieren abordarse a través de medidas políticas y financiación que la Unión Europea resumen en cuatro acciones principales. La primera es la creación de un marco de gobernanza intersectorial para el acceso y la utilización de los datos. En ese sentido, la UE propone:

  • Crear un "marco legislativo operativo para la gobernanza de los espacios comunes de datos europeos" que llegará en el cuarto trimestre de 2020. La idea es que se pueda usar para tomar decisiones en torno a qué datos pueden usarse en según qué situaciones, facilitar a utilización transfronteriza y dar prioridad a los requisitos de interoperabilidad.
  • Implementar una "ley de aplicación de los conjuntos de datos de alto valor" en el primer trimestre de 2021 basada en la Directiva de Datos Abiertos. Su objetivo es abrir los conjuntos de datos de referencia del sector público, es decir, ponerlos a disposición de los usuarios de forma gratuita en toda la UE, convirtiéndolos a un formato legible por las máquinas a través de APIs estandarizadas.
  • En la línea con lo anterior, la UE estudiará la necesidad de adoptar medidas legislativas sobre las cuestiones que afectan a las relaciones entre los agentes de la economía de la información a fin de ofrecer incentivos para el intercambio horizontal de datos entre los sectores.
  • Todo esto se contemplará en la Data Act (2021).
Data

La segunda estrategia de la Unión Europea se resume en "Habilitadores" y básicamente consiste en inversiones en datos y en el fortalecimiento e infraestructuras de Europa para el "alojamiento, procesamiento y utilización de los datos y su interoperabilidad". Entre las medidas que se contemplan están las siguientes:

  • En el periodo 2021-2017, la Comisión invertirá en "Proyectos de Alto Impacto" en los espacios de datos europeos y en las infraestructuras de nubes federadas. Eso se resumen en invertir en infraestructura, herramientas de intercambio de datos, arquitecturas y mecanismos de gobernanza que faciliten el intercambio de datos y, por lo tanto, los ecosistemas de inteligencia artificial. Este proyecto sumará entre cuatro y seis billones de euros, de los cuales dos billones los pondrá la comisión y el resto la industria y los Estados Miembros. Se prevee que la primera implantación se ejecute en 2022.
  • Este proyecto se presentará en marzo de 2020 como parte de una "estrategia industrial" que contemplará un "amplio abanico de inversiones europeas en nuevas tecnologías".
  • También se pretende financiar la creación de unos "espacios de datos comunes e interoperables en toda la UE" en sectores estratégicos, para lo cual se facilitará un "Memorando de entendimiento con los Estados Miembros" para el tercer trimestre de 2020. Estos espacios se detallan más adelante.
  • Se lanzará un mercado europeo de servicios en la nube, integrando toda la oferta de servicios en la nube, en el cuarto trimestre de 2022
  • Se creará un reglamento de autorregulación de la nube en la Unión Europea, algo programado para el segundo trimestre de 2022.

La tercera estrategia consiste en el "empoderamiento de los individuos e inversión en habilidades y en PYMES". La medida más clara es que se actualizará el Plan de Acción de Educación Digital para reforzar el acceso y el uso de los datos, pero hay algunas acciones interesantes:

  • Se añadirán fondos para ampliar la reserva de talentos digitales a unas 250.000 personas que podrán desplegar las últimas tecnologías en las empresas de toda la UE. Para 2025, se quiere haber salvado la brecha de un millón de especialistas digitales, poniendo especial foco en las mujeres.
  • El programa de competencias reforzadas establecerá una vía que muestre cómo la acción de la UE y de los Estados miembros puede aumentar la proporción de la población de la UE con competencias digitales básicas, del 57% actual al 65% para 2025.
  • Finalmente, se explorará la mejora del derecho de portabilidad de las personas en virtud del artículo 20 del GDPR para darles "más control sobre quién puede acceder y utilizar los datos generados por las máquina".

En relación a los "espacios de datos europeos comunes en sectores estratégicos y dominios de interés público", la Unión Europea establecerá los siguientes nueve espacios, cada uno para un sector en concreto:

  • Espacio Común Europeo de Datos Industriales: "para apoyar la competitividad y el rendimiento de la industria de la UE".
  • Espacio de datos del Pacto Verde Europeo: "para utilizar el mayor potencial de datos en apoyo a las medidas prioritarias del Acuerdo Verde sobre el cambio climático, la economía circular, la contaminación cero, la biodiversidad, la deforestación y la garantía de cumplimiento".
  • Espacio Común Europeo de Datos de Movilidad: "para posicionar a Europa en la vanguardia de la desarrollo de un sistema de transporte inteligente, incluyendo coches conectados, así como otros medios de transporte".
  • Espacio Común Europeo de Datos sobre la Salud: "para los avances en prevenir, detectar y curar enfermedades".
  • Espacio Común Europeo de Datos Financieros: "para estimular, mediante la mejora de los datos compartir, la innovación, la transparencia del mercado, la financiación sostenible, así como el acceso a financiación para las empresas europeas y un mercado más integrado".
  • Espacio Común Europeo de Datos sobre Energía: "para promover una mayor disponibilidad y intercambio de datos entre sectores, de forma centrada en el cliente, segura y fiable".
  • Espacio Común Europeo de Datos sobre Agricultura: "para mejorar la sostenibilidad, rendimiento y la competitividad del sector agrícola mediante la elaboración y análisis de la producción y otros datos".
  • Espacio Común Europeo de Datos para la Administración Pública: "para mejorar la transparencia y la rendición de cuentas del gasto público y la calidad del gasto, la lucha contra la corrupción en el ámbito de la UE y nacional".
  • Espacio Común Europeo de Datos para la Administración Pública: "para reducir los desajustes de habilidades entre los sistema de educación y capacitación por un lado y las necesidades del mercado laboral por el otro".

Finalmente, la cuarta estrategia se refiere a "un enfoque internacional abierto, pero proactivo", para lo que se creará un "marco analítico europeo para la medición de los flujos de datos" que llegará en el cuarto trimestre de 2021 y cuyo objetivo es ofrecer un marco con instrumentos que permitan analizar de forma continua los flujos de datos y el desarrollo económico del sector de procesamiento de datos.

Las claves del Libro Blanco sobre inteligencia artificial

Inteligencia Artificial

El Libro Blanco sobre inteligencia artificial, como todo libro blanco, busca ofrecer información sobre cómo se aproxima una organización a cierto problema, en este caso, la regulación de la IA. La UE opina que para aprovechar las oportunidades y sobrepasar los retos que supone la implantación de la IA, se debe actuar basándose en "valores europeos" y promoviendo el desarrollo y despliegue de la inteligencia artificial.

Desde la UE se muestran a favor de un "enfoque orientado a la regulación y la inversión" con el doble objetivo de promover la adopción de la IA y de "abordar los riesgos asociados a determinados usos de esta nueva tecnología". Eso sí, siempre desde el punto de vista de un mercado único que evite la "fragmentación" y permita conseguir la suficiente escala.

El libro blanco se resumen en dos grandes bloques: desarrollar un "ecosistema de excelencia" y desarrollar un "ecosistema de confianza". Como hicimos antes, remarcaremos los principales puntos clave. Aquí van los relacionados con el "ecosistema de excelencia":

  • La UE cree que es necesario aumentar significativamente la inversión en investigación en IA, puesto que solo en 2016 se invirtieron 3,2 billones de euros en Europa, mientras que en Estados Unidos y Asia la inversión fue de 12,1 y 6,5 billones, respectivamente.
  • "La Comisión, teniendo en cuenta los resultados de la consulta pública sobre el Libro Blanco, propondrá a los Estados miembros una revisión del Plan coordinado que se adoptará a finales de 2020".
  • Crear centros de excelencia y de pruebas que puedan combinar inversiones europeas, nacionales y privadas, posiblemente incluyendo un nuevo instrumento jurídico. La Comisión ha propuesto una cantidad ambiciosa y específica para apoyar a los centros de pruebas de referencia mundial en Europa en el marco del Programa Europa Digital y se complementará, cuando proceda, por las actividades de investigación e innovación de Horizonte Europa como parte del Marco Financiero Plurianual para 2021-2027.
  • Establecer y apoyar, a través del pilar de conocimientos avanzados del Programa Europa Digital, redes de las principales universidades e institutos de enseñanza superior para atraer a los mejores profesores y científicos y ofrecer programas de maestría en IA de primer nivel mundial.
  • Trabajar con los Estados miembros para garantizar que al menos un centro de innovación digital por Estado miembro tenga un alto grado de especialización en la IA.
  • Poner en marcha un plan piloto de 100 millones de euros en el primer trimestre de 2020 para proporcionar financiación a los desarrollos innovadores en materia de IA. La intención es ampliarlo a partir de 2021 a través de InvestEU.
  • Establecer una nueva asociación público-privada en materia de IA, datos y robótica para combinar esfuerzos, garantizar la coordinación de la investigación y la innovación en materia de IA, así como colaborar con otras asociaciones público-privadas en Horizonte Europa.
  • Iniciar diálogos abiertos y transparentes sobre el sector, dando prioridad a la atención de la salud, las administraciones rurales y los operadores de servicios públicos, a fin de presentar un plan de acción para facilitar el desarrollo, la experimentación y la adopción. Aquí la UE hace hincapié en que se pondrá especial foco en las áreas relacionadas con la salud y el transporte.
Union Europea

En cuanto al "ecosistema de confianza", la UE es menos clara y quizá algo más abstracta. En pocas palabras, la UE afirma que los actores económicos (las empresas, por ejemplo) son completamente responsables de cumplir con las actuales normativas relacionadas con la inteligencia artificial, como la Race Equiality Directive, la Data Protection Law Enforcemnt Directive y la Euroopean Accesibility Act, que se aplicará a partir de 2025 a los bienes y servicios.

Sin embargo, añade algunos aspectos en los que el marco legislativo podría mejorar para cubrir los posibles riesgos asociados a la inteligencia artificial. Ponen los siguientes ejemplos:

  • La aplicación y el cumplimiento efectivos de la legislación nacional y de la UE en vigor: debido a la "opacidad de la IA" se hace "díficil identificar y probar posibles violaciones de leyes", por lo que puede ser "necesario ajustar o aclarar la legislación vigente en determinadas esferas".
  • Limitaciones del ámbito de aplicación de la legislación vigente de la UE: si bien la legislación de seguridad de los productos de la UE se aplica al software cuando forma parte de un producto final, "queda abierta" la pregunta de si el software independiente, como una IA, está cubierto por esta regulación.
  • Funcionalidad cambiante de los sistemas de IA: dado que la IA se actualiza, se pueden añadir funciones que den lugar a nuevos riesgos que no se contemplaban en la legislación aplicada en el momento de su comercialización.
  • Incertidumbre en cuanto a la asignación de responsabilidades entre los distintos agentes económicos en la cadena de suministro: la responsabilidad de la seguridad de un producto recae en el productor que lo pone en el mercado, pero no queda claro si estas reglas se pueden aplicar si la IA se añade al producto una vez está en el mercado por alguien que no es el productor.
  • Cambios en el concepto de seguridad: el uso de la IA en productos y servicios puede dar lugar a riesgos que la legislación de la UE no aborda explícitamente en la actualidad. Además, estos riesgos pueden estar presentes en el momento de su comercialización o llegar después tras una actualización.

En lo referente a cuándo una inteligencia artificial debe considerarse de alto riesgo, la Comisión opina que debe considerarse "de alto riesgo a la luz de lo que esté en juego", es decir, en función de si su implementación en cierto sector implica riesgos significativos. Para resumir, la Comisión establece dos parámetros que, de cumplirse, calificarían a la IA de "alto riesgo":

  • La aplicación de la IA se emplea en un sector en el que, dadas las características de las actividades que se realizan habitualmente, cabe esperar que se produzcan riesgos importantes.
  • La aplicación de la IA en el sector en cuestión se utiliza, además, de tal manera que es probable que surjan riesgos importantes.

Por otro lado, la Comisión también se refiere a los requisitos legales que se le impondrán a los "actores relevantes" que desarrollen IAs de alto riesgo. Los requisitos planteados son algo genéricos y no están definidos. Para eso, proponen que se definan posteriormente mediante estándares. Los campos que se contemplan, acompañados por sus posibles criterios, son los siguientes:

  • Datos de entrenamiento: que sean suficientemente amplios para evitar situaciones peligrosas, que no generen discriminación y que protejan la privacidad de los datos personales.
  • Conservación de datos y registros: mantener un registro de los datos que se han usado y por qué se han seleccionado y documentar la programación, entrenamiento, procesos y técnicas usadas para construir la IA.
  • Información que debe proporcionarse: como las capacidades y limitaciones de la IA, o informar "claramente" a los usuarios de que están interactuando con una IA y no con un humano.
  • Robustez y precisión: que los resultados sean replicables y que la IA pueda lidiar con errores e inconsistencias durante su vida útil.
  • Supervisión humana: por ejemplo, que los resultados de la IA no sean efectivos hasta que un humano los valide o que sean efectivos de inmediato, pero luego se supervisen.
  • Requisitos específicos para ciertas aplicaciones particulares de la IA, como las utilizadas con fines de identificación biométrica a distancia: tal y como está la normativa europea, el reconocimiento facial a distancia está limitado por el GDPR. Para lidiar con este asunto, la Comisión lanzará un debate relacionado con el uso de la IA en espacios públicos.
Reconocimiento Facial

Finalmente, en cuanto a la gobernanza de las estructuras de inteligencia artificial, la Comisión opina que "una estructura de gobernanza europea sobre la IA en forma de un marco de cooperación de los es necesaria para que las autoridades competentes eviten la fragmentación de responsabilidades, aumenten la capacidad de los Estados Miembros y se aseguren de que Europa se dote progresivamente de la capacidad necesaria para el ensayo y la certificación de los productos y servicios habilitados para la IA".

En la creación de esta estructura, afirman que se "debería garantizar la máxima participación de los interesados. Las partes interesadas -organizaciones de consumidores e interlocutores sociales, empresas, investigadores y organizaciones de la sociedad civil- deben ser consultadas sobre la aplicación y el desarrollo ulterior del marco".

Este libro blanco es un inicio, pero no es definitivo ni mucho menos. Hasta el 19 de mayo de 2020, hay abierto un sistema de comentarios y consultas para añadir mejoras, comentarios, etc. Este sistema es accesible desde el siguiente enlace.



via Magazine - robotica-e-ia https://ift.tt/2vKcXrk

No hay comentarios:

Publicar un comentario