Para entender mucho mejor lo que se está intentando desde NASA hay que entender antes varios conceptos previos, por un lado el tipo de sistemas que hoy día utilizan los rover de la agencia para explorar otros satélites o planetas así como sus inconvenientes. En primer lugar, por todos es conocido el uso que NASA hace de paneles solares en sus vehículos, tecnología que es muy económica, confiable y que los hará moverse casi de forma indefinida mientras que, en últimos modelos se apuesta por un generador termoeléctrico de radioisótopos, un sistema caro, voluminoso que puede proporcionar grandes cantidades de energía durante décadas.
Como tecnología más extendida, sin lugar a dudas, tenemos que hablar de la recolección de energía mediante placas solares, aunque su principal inconveniente, como seguro sabrás, radica en esos momentos donde el rover se encuentra en una zona oscura o sus placas no están directamente expuestas a la luz del sol debido a alguna inclinación o similar. Por otro lado tenemos problemas como la suciedad que hace que su funcionamiento no sea todo lo adecuado. Aun así, debido a su uso tan extenso en muchísimas misiones, se necesita desarrollar algún tipo de sistema que permita precisamente a este tipo de rover explorar zonas oscuras como cráteres, en el caso de la luna, o cuevas si hablamos de Marte.
En el último comunicado de prensa lanzado por NASA, se anuncia que uno de sus equipos de investigadores financiado por el programa Innovative Advanced Concepts estad desarrollando una manera para conseguir llevar luz solar a ambientes extremos o muy oscuros utilizando una serie de espejos robóticos móviles. Es decir, lo que vienen a explicar es que están desarrollando una serie de robots dotados con espejos móviles gigantes capaces de modificar el ángulo de incidencia de los mismos para enviar luz solar directamente a las placas de los rover cuando debido a problemas de oscuridad, sombra… estos no pueden captar la energía suficiente para moverse con solvencia.
Gracias precisamente a este desarrollo, hablamos de robots dotados de una serie de espejos cuya superficie sería equivalente a unos 1.200 metros cuadrados con una masa total de unos 100 kilogramos, una solución que podría ser utilizada en muchas misiones y con rover diferentes. En comparación con los sistemas que utilizan generadores termoeléctricos de radioisótopos, sin lugar a dudas la principal ventaja es el coste de implantación ya que un generador tiene un coste cercano a los 45 millones de dólares, además debido a su volumen y peso no puede ser implantado en rover pequeños y compactos.
Como avance, tan sólo comentarte que esta tecnología desarrollada por NASA está mucho más madura de lo que puedas imaginar ya que el equipo de investigadores ya ha realizado pruebas en La Tierra introduciendo una serie de rover dentro de cuevas o cavernas oscuras y enviando luz al interior desde fuera gracias a este tipo de robots. El próximo paso es enviar una serie de robots dotados de estos paneles solares a la Luna y probar si son capaces de enviar luz solar a un rover metido dentro de un oscuro cráter.
El artículo NASA trabaja en nuevos sistema de alimentación para sus rover exploradores ha sido originalmente publicado en Actualidad Gadget.
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